Cuando alguien cercano muere, somos rápidos para deshacernos de sus posesiones terrenales, y sólo tenemos una tumba o una urna para recordarnos de nuestros seres queridos.
En algunos países los santuarios están hechas de objetos cotidianos utilizados por nuestros seres queridos que nos recuerdan de ellos.
He hecho un encierro de una urna de objetos cotidianos utilizados por la persona que ha fallecido. Mediante el uso de algunas tuercas y tornillos básicos y una mínima cantidad de pegamento, las piezas se colocan juntos para hacer un lugar de descanso final de la urna.
Es una obra de arte, un lugar de descanso para la persona amada, y un recordatorio agradable de la vida de esa persona y las cosas que han utilizado en su vida cotidiana.
El difunto también estará rodeado de los objetos que amaba por la eternidad y una gran forma de reciclaje. También el "pesimismo" que viene con una lápida o urna básica aburrida se ha ido para siempre. Amigos y familiares realmente esperamos que el lugar de descanso final se vea así.
Mientras la persona está viva, que pueden escoger y elegir los artículos con los que desea decorar su lugar de descanso final.
por roldan Jorge Roldán de EE.UU.
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